El nuevo decreto, publicado el pasado 26 de septiembre en la Gazzeta Ufficiale della Repubblica Italiana o, contiene la lista de sustancias vegetales y preparaciones aptas para su uso en complementos alimenticios con instrucciones adicionales para garantizar un mayor nivel de protección al consumidor. Con más de mil plantas incluidas, el nuevo listado favorece, sin duda, un mayor grado de innovación en las formulaciones de productos finales, una petición que viene reclamando la industria desde hace tiempo, sin olvidar la seguridad jurídica que aporta.
Con este nuevo listado, Italia se desmarca, de nuevo, no sólo del resto de Estados miembros sino también, en determinados aspectos, de Francia y Bélgica, países que junto a Italia forman parte del proyecto Belfrit, la iniciativa que tiene por objetivo armonizar el uso de las plantas en los complementos alimenticios ante la inactividad normativa de las instituciones comunitarias. En el caso de determinadas plantas, como en el caso de las antraquinónicas, las advertencias que se recogen en el nuevo decreto italiano son, por ejemplo, menos estrictas que en Francia y en el caso del té verde, Italia no establece ningún límite o advertencia obligatoria.
Detalles del decreto
El decreto incluye dos anexos. En el primero, se recoge la nueva lista de plantas. Todas aparecen listadas por nombre científico, familia taxonómica, partes de plantas permitidas y condiciones de uso. 57 plantas tienen advertencias especiales y, al menos, 25 tienen límites de concentración. 38 tienen uso restringido en el embarazo.
El segundo anexo consiste en pautas para garantizar la seguridad y calidad de los ingredientes de origen vegetal. Se trata, en cierta medida, de pequeñas GMPs similares a las directrices francesas que se recogen en el “Arreté des plantes” de 2014. En este sentido, los fabricantes de productos vegetales y productos terminados deben estar preparados para proporcionar la información requerida a sus clientes y autoridades.
Desde Afepadi creemos que con este nuevo decreto italiano, se pone de manifiesto, una vez más, que el incomprensible y deficitario marco legislativo actual para esta categoría de productos está dando paso a iniciativas nacionales que, en definitiva, vienen a confirmar que sí que es posible una normativa a nivel europeo sobre plantas y extractos de hierbas en complementos alimenticios. Italia, Francia y Bélgica son los países que encabezan la iniciativa de legislar en este aspecto, mientras otros, como España, siguen, de momento, en un estado de stand-by con importantes consecuencias negativas tanto para la industria como para el consumidor. Estos tres países de nuestro entorno han demostrado, desde 1997, que es posible regular sobre esta materia tan compleja como sensible. Tanto en España como en la Unión Europea se echa de menos la voluntad política, imprescindible para avanzar en un tema en el que la demora se cuenta por lustros.